Y en este dulce segundo, la mirada se vuelve triste y recuerda porqué todo va mal. Ahora dime cómo arreglar el mundo, o al menos dime cómo no darme cuenta de este desconcierto.
Un fondo celeste para el teatro de nuestras vidas. Celeste y lleno de sueños de algodón. Cielo, lejano y tentador. Ése que prometen sin ni si quiera haberse parada a mirarlo. A ansíarlo, así cómo lo hago yo.
Y cada deseo, cada sensación, la escondo debajo de mi cama. Y vuelvo a ponerme una nueva sonrisa. Tan creíble, que hasta yo dudo de su autenticidad. Y toda la soledad se amontona en mis manos, en mis pasos.
Just another step until I reach the door. (8)
¿Dónde está mi grito de auxilio, mi empujón hacia delante? ¿Dónde estás tú? ¿Dónde estoy yo?
Dime dónde quieres que vaya, y allí estaré.
Lo repito una y otra vez, con sólo un cruel silencio como respuesta. Todos los que miráis sin saber qué hacer, o con todo hecho, decidme, ¿qué esperan de mí?
Le doy vueltas a los momentos, buscando una solución a este difícil problema, la incertidumbre. Decidiste dejarme al margen. Triste e inútil espectadora de una vida que se derrumba, la mía.
Y tú, dulce alma agotada, estira tu brazo y pide ayuda, que mi mano llora tu ausencia.
Esta, esta me mola, mucho :)
ResponderEliminar(L)
:D
ResponderEliminarA mí me molas tú :$